Investigadores de la Universidad McGill en Montreal, Canadá realizaron un estudio piloto de intervención abierto para analizar el efecto de los cannabinoides THC, CBD con THC y CBD sin THC.
Durante un periodo de 12 semanas los investigadores tomaron a diez personas que viven con VIH y le suministraron al azar algunas de las dosificaciones para corroborar la seguridad terapéutica de los extractos.
A cada individuo se le ajustó su dosis máxima y mínima. La primera fue de 15 mg THC / 15 MG CBD y una máxima de 800 mg de CBD.
El resultado primario fue el porcentaje de participantes sin toxicidad significativa de acuerdo con los niveles indicados por la Organización Mundial de la Salud (OMS). Los cannabinoides no alteraron los perfiles hematológicos/bioquímicos.
“Con propiedades antiinflamatorias, los cannabinoides pueden ser una estrategia potencial para reducir la activación inmune en personas que viven con el VIH (PVVS), pero se necesita más información sobre su seguridad y tolerabilidad”, dice la investigación.
Los investigadores concluyeron que los pacientes con VIH toleran bastante bien el uso variado de cannabinoides.
“En las PVVS, los cannabinoides parecen generalmente seguros y bien tolerados, aunque se necesitan estudios más amplios. Se debe realizar un cribado de patología hepática oculta y controlar las enzimas hepáticas, especialmente con dosis altas de CBD.”
Artículo completo: https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/36551926/
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