Un estudio publicado en la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos determinó que el consumo diario de cannabis puede proteger el hígado graso en personas con Hepatitis C (VHC) y el virus de inmunodeficiencia (VIH).
La investigación se llevó a cabo con 838 pacientes con estas enfermedades. En el estudio del comportamiento de los cannabinoides en este segmento, los investigadores del Instituto Nacional de la Salud y la Investigación Médica (INSERM, siglas en francés), registraron una reducción significativa del riesgo de hígado graso.
El hígado graso o la esteatosis hepática es común en pacientes enfermos o coinfectados con el virus de VIH y VHC.
“Algunos estudios recientes han encontrado que el uso de cannabis tiene un impacto negativo en la resistencia a la insulina en la población general y a los infectados con el virus VIH y HCV. Dado la conexión, hipotetizamos que el uso de cannabis tiene un impacto positivo en la esteatosis”, señala el estudio que se encuentra en PubMed, de la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos.
El método de investigación se basó en un análisis cruzado comparando la información disponible de aquellos consumidores de cannabis y aquellos otros diagnosticados con hígado graso. En ese sentido, se implementó un modelo logístico con el propósito de evaluar la relación entre ambos.
De los 838 pacientes estudiados, el 40,1% padecía esteatosis; de estos, el 14% con un uso esporádico de cannabis, el 11,7% uso habitual y el 74,7% no consumía.
El estudio apunta a que luego del monitoreo en los ajustes de la masa corporal, el consumo excesivo de alcohol y de fármacos como Lamivudino y Zidovudino, el uso diario de cannabis se asocia con una reducción de la prevalencia del hígado graso.
Los investigadores concluyeron que los descubrimientos de este estudio recalcan la necesidad de más evaluación clínica de fármaco terapias basadas en cannabis a nivel poblacional.
Consulte el estudio aquí: http://bit.ly/2iHCxXg
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