Diferentes estudios a gran escala destacan el potencial de la legalización del cannabis tanto medicinal como recreativo para mejorar la calidad de vida. En particular existe una reducción importante en el consumo de drogas de prescripción en la población general.
Al usar datos de Medicaid entre 2011 a 2019, los investigadores de Brooks School of Public Policy de la Universidad de Ithaca, Estados Unidos encontraron que ha existido una considerable reducción de algunas drogas para el manejo del dolor en esa población.
«La posible sustitución del cannabis por medicamentos recetados ha atraído una cantidad sustancial de atención dentro del contexto de las leyes de cannabis medicinal (… ). Sin embargo, se sabe mucho menos sobre la asociación entre las leyes de cannabis recreativo (…) y el uso de medicamentos recetados», apuntan los investigadores.
Esa clase de medicamentos que empiezan a ser sustituidos representan un gran grupo desde dolor, ansiedad, psicosis, sueño, convulsiones y depresión.
«Nuestros resultados sugieren la sustitución de los medicamentos recetados y los posibles ahorros de costos para los programas estatales de Medicaid», finaliza el estudio.
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