Uruguay ha hecho historia. El país sudamericano exportó a Australia 10 toneladas de cannabis para uso medicinal, además con alto contenido del componente THC.
La noticia fue dada a conocer esta mañana por Associated Press..
“Esto significa el fin de las políticas de drogas tal como han existido en los últimos 50 o 60 años y el comienzo de una nueva era de uso racional del cannabis”, dijo Jordan Lewis, principal de la empresa exportadora Fotmer.
Las 10 toneladas de flores de alto grado medicinal serán comercializadas en Australia donde existe un marco legal para el uso de cannabis medicinal. Cada gramo se venderá en alrededor de 4 a 9 dólares.
Según fuentes locales, el gobierno planea que el país se convierta en el primer exportador del mundo en un esquema industrial de alta escala.
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“Es la confirmación de que nuestro marco regulador del cannabis ofrece una salida adecuada a los problemas del modelo prohibicionista, en este caso habilitando la aplicación de la ciencia y la tecnología a la producción medicinal de alta calidad. Los mercados más exigentes están poniendo la mirada en Uruguay”, dijo Diego Olivera, secretario general de Junta Nacional de Drogas.
Según los empresarios, se planea seguir rutas de exportación a todo el mundo. Subrayando Europa y Australia. Asimismo, indicaron que para llegar a este punto tuvieron que generar una logística altamente complicada que les demandó nueve meses de trabajo.
La empresa que realizó este hecho histórico se llama Fotmer y emplea directamente a 170. Sus productos son cremas, cápsulas y aceites medicinales.
Para ello, siembran, extraen e investigan los mejores métodos para lograrlo. Según los expertos, “las flores de marihuana empleada para fines médicos no difieren de las usadas para uso recreativo”. Sin embargo, los controles de calidad y cuidados son muy diferentes a causa de las regulaciones de la industria médica.
Este tipo de productos pueden utilizarse para el tratamiento de múltiples enfermedades como la epilepsia refractaria, artritis, cáncer, esclerosis múltiple, enfermedad de crohn, efectos secundarios de la quimioterapia, estrés, ansiedad, dolores crónicos y más.
Para ello se utilizan flores altas en CBD y THC. Desde el 2013, el Uruguay habilitó todo tipo de regulación tanto para la parte medicinal y la recreativa.
El gobierno vaticinó en ese entonces que esta industria traería grandes beneficios económicos para el país.
Foto: Fotmer
en Costa Rica. 
