La República Checa está en proceso de desarrollar un mercado de cannabis estrictamente regulado, en el que los consumidores tendrán que registrarse, mientras que las tiendas minoristas y los productores deberán pagar tarifas anuales.
Se espera que el estado obtenga miles de millones de coronas checas en ingresos.
Aunque el consumo personal de cannabis está legalizado a nivel nacional en la República Checa, la venta y distribución de la droga siguen siendo ilegales. El nuevo reglamento se centra en abordar la distribución del cannabis.
Según Jindřich Vobořil, coordinador nacional de drogas, el objetivo de la propuesta es proteger mejor a los consumidores y tener un mayor control sobre la calidad y cantidad de cannabis en el mercado. Además, se espera que los ingresos fiscales del estado aumenten significativamente.
El plan para el mercado regulado de cannabis incluirá regalías y un impuesto al cannabis, que funcionará de manera similar a un impuesto especial. Según las estimaciones, solo los ingresos anuales provenientes de este impuesto podrían llegar a dos mil millones de coronas checas en el mercado checo.
Además, existe la posibilidad de obtener ingresos adicionales a través de exportaciones a países europeos que ya han legalizado o están experimentando con un mercado legal de cannabis para uso recreativo, como Alemania, Malta, los Países Bajos, Luxemburgo y Suiza.
«Como parte de la regulación del mercado, no queremos limitar el número de licencias para la venta y el cultivo. Se emitirán mediante solicitud y el pago de una tarifa anual regular, que oscilará entre 50 y 100 coronas checas para tiendas más pequeñas», explicó Jindřich Vobořil a Seznam Zprávy.
La propuesta también contempla el registro obligatorio de los consumidores. Los clientes solo podrán comprar una cantidad limitada de cannabis al mes para evitar el intercambio ilegal de bienes. Los minoristas tendrán acceso al registro a través de un código específico y podrán verificar las cantidades de cannabis que ya se han adquirido.
El límite propuesto es de hasta 150 gramos de cannabis por persona al mes, aunque este límite aún está sujeto a negociación. Se espera que un mercado controlado de cannabis sea una herramienta más efectiva para prevenir el mercado negro que la prohibición misma.
La propuesta también incluye regulaciones sobre la publicidad de productos de cannabis y el etiquetado de los mismos, así como límites en la cantidad de THC permitida en la planta.
Si se implementa con éxito, la introducción de un mercado regulado de cannabis en la República Checa crearía un mercado anual de hasta ciento cincuenta toneladas de cannabis. La propuesta actual se encuentra en discusión y se espera que los detalles de la regulación sean finalizados en abril.
en Costa Rica. 
